Potenciales e inversiones públicas por región: el caso Tumbes

26/08/2019

Con la presente entrega se inicia una serie de 24 artículos en los que se realizará una vista general de los principales valores estratégicos de cada región, la priorización, avances de las inversiones nacionales y regionales actuales, así como nuestra propuesta país para cada una de ellas.

Cabe señalar, que de los S/ 47,428´553,966.00 de la inversión pública que se realiza en los tres niveles de gobierno a nivel departamental, Tumbes es el que tiene la menor inversión relativa entre las 25 regiones (incluyendo Callao), con tan solo un 1.18% de dicha inversión, un equivalente a S/ 558´968,054.00. Siguen en orden ascendente, Madre de Dios (1.18%), Tacna (1.28%) y Moquegua (1.30%). Es revelador, como las dos regiones fronterizas, geopolíticamente de mayor importancia en Perú, se encuentran entre las que reciben menor inversión pública, sólo una observación a tener en cuenta.

Para esta serie de análisis regional, iniciaremos por las regiones con menor avance en inversiones y con menor monto relativo de inversión pública a nivel nacional.

Tumbes y sus principales potenciales

Podríamos definir a la región por sus potenciales turísticos (Playa, pesca deportiva, avistamiento de ballenas y arqueología), gastronómicos (conchas negras, langostinos y langosta), pero es más que eso, con ganadería, agricultura (banano orgánico) y bosques secos. Con una temperatura media anual de 24.9, máxima de 27 y mínima de 19 grados centígrados, ya casi preparamos maletas para escapar de este frío invierno.

Su máxima atracción natural se encuentra en Punta Sal y Zorritos, con excelentes playas de arena blanca, mar esmeralda y un sol que asegura atardeceres inolvidables; la zona es parte del Parque Nacional Cerros de Amotape, donde el ecoturismo es un vasto potencial para cualquier amante de las caminatas en bosque seco.

Por otro lado, Puerto Pizarro ubicado a trece kilómetros de la ciudad de Tumbes, es una pequeña caleta de pescadores y extractores de conchas negras. Sus aguas poco profundas posibilitan la práctica de Windsurf, esquí acuático y paseos en lancha, lo que lo convierte en un atractivo turístico importante. Desde este lugar se contratan paseos en lanchas para visitar los manglares, islas cercanas (islas del Amor y Hueso de Ballena) y realizar pesca deportiva. En estos recorridos se puede visitar el criadero del Cocodrilo de Tumbes que es una especie endémica en peligro (única en el mundo).

Muchos coleccionamos las monedas de un sol de la serie numismática «riqueza y orgullo del Perú (del BCRP), que en una de ellas considera como principal atractivo de Tumbes al complejo arqueológico “Cabeza de Vaca”, situado en el distrito de Corrales y no le falta razón. Este atractivo cuenta con una extensión de 69 hectáreas, y según las investigaciones fue el centro administrativo-ceremonial más importante de la zona norte durante la época prehispánica. Ocupa un lugar estratégico en el Qhapaq Ñan, se sitúa en el tramo inicial del Camino Inca de la Costa y a su vez de la vía marítima que accede al producto más valorado en el mundo andino: el Spondylus (la moneda o medio de cambio del imperio). Descrito en la literatura arqueológica como “Corrales”, “San Pedro de los Incas”, “Tumbes Antiguo” o “Cabeza de Huaca”, actualmente es un sitio emblemático para la identidad cultural de la región. A pesar de haber sido declarado como Patrimonio Cultural de la Nación en el año 2000, este complejo viene sufriendo un fuerte impacto por la expansión demográfica y agrícola en la zona.

Con respecto al atractivo gastronómico, no hay redacción necesaria, sólo vamos a enumerarlas y ustedes juzgarán: ceviche de conchas negras, chilcano de pescado, majarisco tumbesino, arroz con mariscos, enrollado de mero en pulpa de cangrejo, chicharrón de pescado, albóndigas de pulpa de cangrejo, patacones de langostinos, chupe de cangrejo. El resto es disfrute en silencio.

Las parrillas, industria de la carne y lácteos también están presentes en la zona, los productores de distintas asociaciones ganaderas de la región continúan recibiendo el apoyo de su Gobierno Regional, como apoyo al desarrollo rural. Las principales inversiones están relacionadas a la siembra de pastos en beneficio de ganaderos presentes en Zorritos, Canoas de Punta Sal y Casitas.

Asimismo, la región tiene gran potencial para plantaciones de bambú, las mismas que se vienen incrementando en la región vecina de Piura. El registro de esta especie forestal no maderable, conocida regionalmente como “caña de Guayaquil”, alcanza en Piura unas 210 hectáreas y su producción supera las 600 mil unidades, beneficiando económicamente principalmente a campesinos. Cabe señalar que, de acuerdo a información de SERFOR con respecto a la cadena productiva del bambú, se estima que en el Perú existe una demanda de 10 millones de “cañas de Guayaquil”, siendo la producción nacional sólo de 2 millones, el resto es producto de la importación.

Tumbes y la priorización de inversiones

Recurriendo al Seguimiento de la Ejecución Presupuestal (Consulta amigable) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), se encuentra que el ranking de inversiones de las unidades ejecutoras regionales (las que realizan el gasto en el departamento), El Gobierno Regional es el que más invierte (88.93%), seguido por el gasto en educación (8.53%), agricultura (1.89%), salud (0.58%) y transportes (0.08%). El avance promedio en la ejecución del gasto en inversión a nivel del gobierno regional es de apenas 19.12% al 24 de agosto, lo que denota un gran atraso, que debe ser acelerado en estos últimos meses. Los detalles pueden ser observados en el siguiente cuadro:

Pero, ¿en qué gasta la sede central del gobierno regional?; realizando un análisis a más detalle podemos observar que su mayor inversión la realiza en: educación (38.39%), transporte (25.78%) y los sectores productivos (agricultura, producción y turismo, con 23.63%). Existe una baja inversión en vulnerabilidad y desastres (3.10%), criticable debido a que tiene un 0% de avance del gasto por ese concepto, no obstante ser unas de las regiones históricamente más afectadas por los fenómenos naturales.

Por su parte, el detalle de los sectores productivos nos demuestra que la mayor inversión se viene realizando en ganadería, con un 22.08% del total de la inversión de la región (casi toda la inversión en sectores productivos). Aun se observa una baja priorización de inversión hacia los sectores de pesca (0.73%), turismo (0.6%), acuicultura (0.21%) y banano (0.01%) del total de la inversión regional, no obstante tener un gran potencial para el desarrollo económico.

Un hecho es destacable, el avance de ejecución en ganadería es paupérrimo (1.88%) no obstante ser el mayor gasto priorizado; caso distinto el de los otros sectores, cuyo avance relativo se sitúa entre 74% y 100%, confirmándose que son inversiones en el marco del PROCOMPITE, que como ya hemos visto y recomendado anteriormente (ver: El camino largo y el camino corto), acelera el gasto de inversión, y su pronta llegada al campo; para muestra unos botones.

Tumbes y nuestra propuesta país

La región se puede considerar un paraíso gastronómico de comida marina, que coadyuva sin duda a su valoración turística. En tanto, a través de esta tribuna recomendamos una mayor inversión pública en Hatcherys (criaderos) de Conchas Negras, con la finalidad de tener una extracción sostenible de dicho recurso con oferta única en dicha región. También propiciar la crianza de conchas de abanico, langostinos, langostas junior y pesca de langostas, cachemas y otras especies. Hay muy buenas y exitosas experiencias realizadas en este sentido por parte del Programa Nacional de Innovación en Pesca y Acuicultura – PNIPA y de la RED CITE del ITP del Ministerio de la Producción, de ahora en adelante sólo es cuestión de masificarlas en pro del desarrollo económico y social de la región. Esta es una inversión que puede manejarse a través del PROCOMPITE, y aún hay tiempo este año para ejecutar algunos.
En la línea de alternativas económicas de la región, la inversión en la siembra y manejo del Bambú, es sin duda una inversión rentable social y económicamente, sirviendo en tres dimensiones específicas, i) defensas ribereñas ante los desastres causados por inundaciones, muy comunes en esta región; ii) construcción de casas habitación con este material, bajo las fichas técnicas vigentes en manos del Ministerio de Vivienda (MVCS); y iii) diversificación productiva y de ingresos para los pobladores de la zona. Esta articulación se viene manejando entre el Gore Tumbes y el SERFOR y una salida para acelerar el gasto es sin duda el PROCOMPITE.
Con respecto a los atractivos turísticos marítimos, es necesaria la construcción de un embarcadero turístico en Puerto Pizarro, que sirva como foco para propiciar la inversión privada en pequeñas embarcaciones turísticas como las que podemos observar en Paracas (Ica), que sean destinadas a los avistamientos de ballenas y aves marinas, pesca deportiva, así como la visita a los manglares, maravilla ecoturística de esta región.
El turismo de convenciones, congresos e incentivos, se ha convertido en un segmento importante dentro de las estrategias de comercialización de determinados destinos, donde Tumbes sin duda tiene ventajas competitivas entre otras regiones del país. Poner en valor el complejo Cabeza de Vaca, cuya importancia en la historia latinoamericana está poco explotada puede ser una solución en esta línea; se podría propiciar un centro de interpretación, un centro de convenciones y restaurantes en el ámbito de dicho centro arqueológico, que generen un flujo de recursos que autofinancie el mantenimiento e investigación de todo el complejo, a la vez de generar las condiciones para que en los alrededores, se consolide un foco de desarrollo turístico para convenciones nacionales e internacionales. Cabe señalar que, las actividades relacionadas con los congresos ayudan a la dinamización socio-económica de la zona de influencia directa y en suma de toda la región.
Se debe tener especial cuidado en la limpieza de las playas de Zorritos, que en muchos casos no tienen el mantenimiento correcto, pudiéndose encontrar en la arena restos orgánicos y los infaltables plásticos. No es necesaria una intervención en infraestructura mayor, dado que el mejor atractivo de estas playas es su estado natural. Se sugiere la atención periódica de limpieza con rastrillos motorizados y recolectores de desperdicios, así como una intervención con pequeñas infraestructuras a manera de ramadas con materiales de la zona (caña), que podrían utilizarse para celebrar matrimonios en un paraje idílico, estrategia turística que se ha dinamizado en Máncora a escasos 40 minutos de distancia, y que asegura la permanencia de un grupo grande de personas por al menos dos días. Estas pequeñas inversiones en maquinaria e infraestructura podrían ser manejados a través del PROCOMPITE, sólo falta decisión y voluntad.
Finalmente, para complementar todas estas propuestas, se debe propiciar la mayor frecuencia de vuelos a Tumbes, dado que actualmente es una de las ciudades más caras para el acceso vía aérea (con tan solo 4 arribos en temporada alta y 2 en baja). Por la diferencia en el costo de los pasajes, gran parte de pasajeros prefiere utilizar los vuelos vía Talara o Piura, aunque eso implique luego entre 1 y 3 horas de viaje adicional vía terrestre.