Crisis del agua: ¿La crónica de una muerte anunciada?
06/07/2023
Mientras el cambio climático transforma nuestro entorno afectando gravemente la seguridad y el bienestar de las comunidades en todo el planeta y pone en riesgo la vida de la población menos favorecida y vulnerable, la política se empequeñece -también en todo el mundo- polarizada y enfocada en batallas ideológicas e intereses personales y grupales.
¿Podemos ponernos de acuerdo y poner en marcha acciones articuladas y efectivas para enfrentar los verdaderos problemas? Las fuentes de agua, los desastres naturales y la pobreza deben ser parte de una agenda común. Hoy hablamos sobre el agua.
La crisis del agua
Hemos escrito mucho sobre esto. (Ver: “Confiabilidad en el abastecimiento en las grandes ciudades: cambiando de paradigma” , o “Y qué hacemos si nos falta el agua”).
Está demostrado que los patrones de lluvia están cambiando drásticamente en todas partes. Y entonces los reservorios y acuíferos no se cargan o, por el contrario, se generan inundaciones que afectan gravemente la infraestructura y los servicios. Están en riesgo el abastecimiento a las ciudades, la producción de alimentos y de energía y la continuidad de gran parte de las actividades productivas.
Ya se quedó sin agua Montevideo, que hoy es abastecida con una mezcla de agua salada y dulce con contenidos de cloruros y sodio fuera de norma de salubridad, y partes importantes de Veracruz no tienen servicio y no hay una alternativa visible para resolver el problema.
En el Perú, solo el 4% de las ciudades vulnerables al cambio climático tienen una fuente alternativa de abastecimiento. Lima y ciudades importantes de las regiones de Lambayeque, Piura, Tumbes, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, entre otras, no tendrán agua el 2040. Y podrían no tenerla en cualquier momento a partir de ahora, si un evento extremo natural o antrópico afecta severamente las fuentes actuales.
Ya en este momento zonas de Puno y Huancavelica no pueden ser adecuadamente abastecidas y hay una probabilidad significativa de que El Niño global afecte la infraestructura de agua potable y el abastecimiento de energía en parte importante del país.
Inversiones
Mitigar la crisis del agua requiere concretar (no solo planificar) grandes inversiones. Los costos son muy altos pero los de enfrentarla sin haber tomado medidas serán inmensamente mayores.
Estados Unidos invierte 50,000 millones de dólares anuales en infraestructura de agua, aunque sin posibilidad de salvar ya a California; Arabia Saudita construye un río artificial subterráneo de 12,000 kilómetros cuya fuente serán plantas desalinizadoras, y China un gran canal que conectará la presa Tres Gargantas con Pekín y formará parte de una red de 20,000 kilómetros.
Sin embargo, como hemos comentado en los artículos referidos, en nuestro país los proyectos tardan décadas en concretarse.
Obras de Cabecera (Marca II), proyecto que tiene más de 23 años con estudios, aún no se adjudica. Y Majes – Siguas II, trascendental para Arequipa, está en camino de resolución, más de 13 años después de haber sido licitado. Chavimochic, afortunadamente, parece seguir adelante.
¿Qué hacer?
Los últimos Decretos de Urgencia del sector vivienda para asegurar la continuidad del servicio en zonas declaradas en emergencia por El Niño y para posibilitar el abastecimiento a la población vulnerable, son medidas positivas y necesarias en el corto plazo. También es importante que Sunass haya implementado el índice de seguridad del abastecimiento. Se avanza en la gestión integrada del recurso en algunas cuencas, OTASS hace mejoras graduales en algunas EPS y hay esfuerzos encomiables en conservación de fuentes como el de EMUSAP Abancay en Apurímac. A nivel más general, la Autoridad Nacional de Infraestructura es una apuesta interesante, que podría ver algunos proyectos relevantes de gestión de recursos hídricos, pero ¿Cuándo estará operativa?.
Por la magnitud del reto y la urgencia de enfrentarlo, se requieren medidas radicales empezando por atacar de manera inmediata el problema estructural de las fuentes, y esta es una tarea multisectorial de máximo nivel que requiere recursos y simplificación de procesos. Los Ministros de MVCS, MIDAGRI, MINAM deben pedir al Ministro de Economía, que ya ha tomado buenas decisiones y parece pragmático, se incorpore al Consejo Directivo de la ANA, y constituir un Comité Ministerial de Emergencia por el Agua cuya primera tarea sea promover un Decreto de Urgencia para:
- Asegurar el financiamiento, compartido con los Gobiernos Regionales, para los proyectos prioritarios en fuentes de abastecimiento incluidos en los Planes de Gestión Integrada de Recursos Hídricos aprobados. Estos pueden ejecutarse bajo obra pública, APP u OXI.
- Simplificar los procesos de APP para infraestructura relacionada con Recursos Hídricos.
- Autorizar la contratación con procesos simplificados de estudios especializados para establecer la fuente o la combinación de fuentes alternativas de abastecimiento óptima (superficial, subterránea, reúso, desaladoras) en cuencas que no tengan estudios.
- Autorizar la contratación con procesos simplificados de estudios para soluciones basadas en la naturaleza a gran escala que contribuyan a la seguridad hídrica, y asignar recursos para financiar o cofinanciar su ejecución por entidades especializadas públicas o privadas o fondos de agua. Hay financiamiento internacional que coordina PROFONAMPE y fuentes bilaterales y multilaterales.
- Conformar un equipo de muy alto nivel para abordar y resolver la problemática social asociada a los proyectos de recursos hídricos.
- Aprobar cambios normativos para permitir inversiones en fuentes de abastecimiento redundantes.
- Promover OXI para infraestructura natural.
Todo esto en adición a lo que puedan hacer los sectores, los Consejos de Recursos Hídricos de Cuenca, las EPS, las empresas privadas y la sociedad civil para promover el uso eficiente y el reúso de los recursos hídricos. Hay muchas otras tareas, como incrementar drásticamente la eficiencia de las EPS, que serán materia de otro artículo.
Ahora viene El Niño, y hay que atender las urgencias, pero si no se pone en marcha ahora, en pocos años, la población de gran parte del país será migrante.
[2] https://propuestapais.pe/noticia/y-que-hacemos-si-nos-falta-el-agua/ (2020).