La economía argentina

09/07/2019

Por Eloy Durán

El proceso de independencia de Argentina se concretó luego de seis años, un día como hoy, 9 de julio de 1816. Esta fecha, también, marca el inicio de la llamada “paradoja argentina”, es decir el proceso por el cual pasó de ser el país más rico del mundo en 1895 (por encima de Estados Unidos, Bélgica y Reino Unido, según un estudio del Maddison Historical Statistics) a ser una economía debilitada en estos días.

¿Qué sucedió? Hubo una sucesión de gobiernos con más errores que aciertos a partir de la década de 1930 (“la década infame”), pasando por el peronismo y el militarismo, y terminando con el peronismo de derecha (Menem) e izquierda (Kirchner-Fernández), que compartieron políticas económicas proteccionistas e intervencionistas.

Hoy, según el Fondo Monetario Internacional, a nivel mundial, Argentina tiene el puesto 27º en el PBI y el puesto 71º en el PBI per capita. Asimismo, es el primer exportador mundial de harinas, aceites, peras, limones, uvas y yerba mate; segundo de maíz y miel; tercero de soja; cuarto de algodón, carnes y vinos; quinto de trigo y aceitunas; sétimo de cereales y cuero. Además, destaca por su producción mineral (litio y plata), pesquera (merluza y langostinos), forestal (pino y eucalipto), de vehículos (automóviles y camiones), de tecnología y de turismo (segundo en Latinoamérica).

En 2019, a nivel mundial, Argentina es el tercer país con mayor inflación proyectada (tras Venezuela y Sudán del Sur) y es el sétimo país con mayor recesión (tras Venezuela, Guinea, Irán, Nicaragua, Sudán y Turquía). En 2019, se habrá acumulado 5 años de recesión en el último ochenio; y se habrá acentuado los conflictos sindicales y políticos. En ese contexto, se avecinan las elecciones presidenciales (primarias el 11 de agosto, primera vuelta el 27 de octubre y segunda vuelta el 24 de noviembre), siendo los principales candidatos el actual presidente Macri y el senador Pichetto (por Juntos por el Cambio con 29% de intención de voto); y el ex Jefe de Gabinete del presidente Kirchner, Alberto Fernández, y la ex presidenta Cristina Fernández (por el Frente de Todos, con 32% de intención de voto).

Lecciones para el Perú

1. Debemos mantener la política económica general. Pero también debemos enfatizar la promoción de ciertas actividades productivas, la mejora del ingreso y empleo, y la reducción de la pobreza.

2. Debemos mejorar la infraestructura aeroportuaria. Buenos Aires tiene dos aeropuertos (Ezeiza y Aeroparque), y otras varias ciudades reciben vuelos del exterior (Córdoba, Mendoza, Rosario, Salta y Tucumán).

3. Debemos mejorar el servicio vial interurbano y urbano. Es necesario un ordenamiento de los terminales terrestres y un mayor control en las carreteras y principales avenidas de las ciudades más importantes.

4. Debemos mejorar algunos servicios públicos urbanos: recreación, áreas verdes, limpieza y seguridad.

5. Debemos mejorar la prestación de algunos servicios públicos vinculados al desarrollo social: seguridad, saneamiento, salud, educación.

6. Debemos mejorar algunos servicios públicos vinculados al desarrollo económico: turismo, energía, comunicaciones.

En conclusión, Argentina acumula varios años de erradas políticas económicas que han limitado su progreso. Mientras tanto, Perú tiene un mejor manejo económico, pero aún está lejos de alcanzar el bienestar que tuvo el país sureño. La explicación de esto radica en que Argentina hizo su tarea anteriormente y Perú aún no asume este proceso a cabalidad. Nuestras autoridades nacionales y locales tienen el mandato y el presupuesto, faltan la voluntad y la capacidad.