Ensayo sobre la ceguera

22/05/2020

Por Juan Manuel Robles

Una de las principales obras de la literatura retrata cómo actúan las personas ante una pandemia. La obra es “Ensayo sobre la ceguera” del portugués José Saramago. Y, dentro de sus múltiples lecturas, una que llama mucho la atención es cómo, frente al miedo, el orden social se desintegra rápidamente.

En esta obra, también, podemos ver que ese miedo puede dividirse en dos categorías: (i) miedo a la enfermedad (efecto inmediato); y (ii) miedo a cómo nos organizamos durante la pandemia (efecto mediato).

Visto ello así, podemos ver que existen los mismos miedos en nuestra propia y real pandemia. Los mismos más uno: un efecto futuro, que es aquel derivado de las consecuencias (negativas) que dejará esta pandemia en nuestra economía.

En este sentido, una de las principales preocupaciones que debe tener nuestro gobierno es cómo implementar políticas que permitan tener un fuerte impacto en las categorías antes señaladas (inmediata, mediata y futura).

De acuerdo con ello, analizaremos en este breve ensayo una serie de políticas que, transversalmente, podrían tener un buen impacto en los efectos detectados.

Para estos efectos, señalaremos en primer lugar, algunos puntos a tener en cuenta:

1. Puntos a considerar:

1.1. Comportamiento de precios de productos básicos e inflación:

En primer lugar, empezaremos señalando el comportamiento de los precios de determinados productos esenciales al mes de abril de 2020, sobre la base de la información publicada por el BCRP (https://www.bcrp.gob.pe/docs/Publicaciones/Notas-Estudios/2020/nota-de-estudios-32-2020.pdf):

Dichas variaciones de precios generaron que la inflación en el mes de abril de 2020 sea de 0.10%. Sin embargo, podemos observar que existen, en muchos de los productos reseñados, algunas causas a observar:

(i) Aumento de costos en la oferta por gastos en sanidad.
(ii) Menor oferta por cierre de lugares donde se comercia el producto (terminales pesqueros y mercados).
(iii) Encarecimiento de fletes.

1.2. Las mejores herramientas para prevenir un aumento sustancial de casos de COVID 19:

En segundo lugar, debemos recordar que, tal como se ha publicado en diversos medios y en múltiples oportunidades, las mejores herramientas que tenemos para prevenir un aumento sustancial de casos de COVID 19 son: (i) medidas de higiene; (ii) realización de pruebas a nivel masivo y, en la medida de lo posible, rastrear fuentes de contagio y posibilidad de contagio; y (iii) distanciamiento social (para mayor información al respecto puede revisarse It’s Not Too Late to Go on Offense Against the Coronavirus).

Sobre este particular, es pertinente recordar una gran verdad aplicable a nuestro país: La medicina pública está infrapreparada y ya está sobrecargada.

1.3. Indicadores a la fecha sobre producción, desempleo, ingresos públicos y expectativas de crecimiento:

Finalmente, debe señalarse que a abril de 2020, tenemos una tasa de desempleo del 9% y una caída en la producción nacional en el período enero – marzo de 2020 de 3.39%, de acuerdo con información proporcionada por el INEI.
Por otro lado, en abril de 2020 el sector público no financiero registró un déficit económico de S/ 3 458 millones, resultado que contrasta con el superávit registrado en abril de 2019 (S/ 3,759 millones) (información disponible en: https://www.bcrp.gob.pe/docs/Publicaciones/Notas-Estudios/2020/nota-de-estudios-35-2020.pdf).

Por último, las expectativas de crecimiento del PBI a 12 meses se redujeron de 0,5 por ciento a -1,5 por ciento alcanzando su mínimo desde que se tiene registro (diciembre del 2006) (información disponible en: https://www.bcrp.gob.pe/docs/Publicaciones/Notas-Estudios/2020/nota-de-estudios-31-2020.pdf).

Señalados ya los puntos a considerar, debemos indicar que existen políticas que podrían atender adecuada y transversalmente todos esos puntos:

II. Políticas a analizarse:

2.1. Reingeniería de puestos de comercio (terminales, mercados, etc.) y creación de productos financieros para estos:

Como ya sabemos, un foco infeccioso importante en nuestro país ha sido y sigue siendo los puestos de comercio (terminales, mercados, etc.). Las razones saltan a la vista. No hay una adecuada organización de los mismos, dado que estos no han sido diseñados pensando en mantener una adecuada higiene y distanciamiento social, y muchos de ellos siguen en la informalidad.

En este sentido, se requiere como mínimo:

(i) Mejorar la infraestructura de los mismos, de tal manera que se garantice el distanciamiento.
(ii) Verificar condiciones mínimas de salubridad: agua potable, depósito de desechos, luz, etc.
(iii) Establecer condiciones adecuadas para la organización de los mismos.
(iv) Formalización de los mismos para un adecuado seguimiento de las políticas de sanidad.

Todas dichas condiciones deben ser implementadas a través de una acción decisiva del Estado y de adecuados productos financieros que permitan que los mercados privados puedan implementar dichas condiciones (financiando la reconstrucción de estos).

Es más, si bien ello debió ser realizado mucho tiempo atrás, consideramos que esta situación puede ser utilizada justamente para adecuar nuestra infraestructura, al menos en este sector, de tal manera que estemos preparados para otras situaciones (mayor información en https://www.newyorker.com/news/annals-of-a-warming-planet/how-we-can-build-a-hardier-world-after-the-coronavirus).

2.2. Medidas de apoyo al transporte (flete):

Así como se han creado productos financieros que facilitaron el otorgamiento de créditos a determinadas empresas (Reactiva Perú y el fondo CRECER); puede establecerse la creación de un producto financiero dirigido al transporte de tal manera que: (i) se otorgue créditos a tasas reducidas; (ii) se solicite la implementación de medidas sanitarias para la adecuada administración del servicio; y (iii) se incentive el crecimiento o, al menos, el sostenimiento del sector.

III. Consecuencias:

La consecuencia natural de las políticas antes señaladas sería:

(i) Reducción de la probabilidad de contagio de la enfermedad debido a la reingeniería de las fuentes de contagio (terminales, mercados y la implementación de medidas sanitarias para el sector transporte). Con ello, se reduce el efecto inmediato de la pandemia.

(ii) Menor volatilidad de los precios de productos básicos, con lo cual se genera una menor inflación y, además, se hacen más accesibles los productos básicos a la población. Así, se reduce el efecto mediato de la pandemia. Adicionalmente a lo señalado, debemos indicar como nota adicional que, de acuerdo con el IMF (https://data.imf.org/regular.aspx?key=61015892), el peso en nuestro índice de precios al consumidor de alimentos es de 25.13% y el del transporte es del 12.63%.

(iii) Mayor contratación de personal en los referidos sectores: con ello reducimos en alguna medida la tasa de desempleo, aumentamos la productividad, y generamos mayores ingresos para el Estado. Es decir, con ello reducimos el efecto mediato nuevamente.

Lo antes señalado no es una receta mágica ni es la primera vez que se señala; pero consideramos que es necesario acompañarlo de una adecuada transmisión de esta información y de los motivos detrás de ellas.

En efecto, una transmisión adecuada a la ciudadanía de los efectos de la política y las razones detrás de ella, generaría una mejor percepción de crecimiento del país y una mayor confianza en nuestras instituciones. Con ello reducimos el impacto negativo del efecto futuro.

Sin embargo, en este punto es importante recordar lo mencionado por Tim Besley y Andrés Velasco: “La política sin un soporte científico se convierte rápidamente en charlatanería”.

Así, es importante que las autoridades, si bien pueden tomar (y tomarán) decisiones que no satisfagan a todos; informen, gusten o no, el razonamiento que hay detrás de dichas decisiones y que dicho razonamiento haya sido validado por equipos técnicos especializados. Ello porque es necesario explicar las mismas adecuadamente y estar abierto a sugerencias, lo cual -como ya hemos señalado- ayudará a reconstruir la confianza en el mercado (un hecho que ya ha sido señalado como esencial por el Fondo Monetario Internacional – IMF en su World Economic Outlook, January 2020).

Es más, al respecto, existen múltiples artículos que indican los terribles efectos que la mala, así como la escasa, información genera, especialmente en una pandemia (Ver https://bfi.uchicago.edu/wp-content/uploads/BFI_WP_202044.pdf).

En este sentido, es imperativo que estemos mejor y mayor informados de cómo el Estado se encuentra administrando estos tiempos.

Después de todo, las distopias, a veces, suceden. Y esta puede venir no sólo por una enfermedad, sino por mantener en una ceguera blanca a toda tu ciudadanía.