El gasto público en el 2019

12/07/2019

Por Eloy Durán

El gasto público no sólo es inversión pública, más aún ésta sólo representa el 25% del presupuesto total de 2019 de casi S/ 185,249 millones. El 75% del gasto está presupuestado para financiar las actividades permanentes del Estado. Veamos cómo se van desempeñando los principales rubros de gasto.

Inversión pública vinculada a proyectos

El presupuesto total es S/ 46,439 millones. El 22% de éste corresponde a los Gobiernos Regionales (GR), quienes ya han ejecutado el 22% del presupuesto. En el caso de los Gobiernos Locales (GL), que tienen el 36% del presupuesto, el avance está en 28%. Y en el caso del Gobierno Nacional (GN), donde no hubo elección de nuevas autoridades -pero sí rotación de funcionarios-, se tiene el 42% del presupuesto total y el avance está llegando a 26%.

Este año será el cuarto consecutivo con un desempeño que deja de ejecutar la tercera parte del presupuesto de inversiones. Esto significó S/ 17,028 millones en 2018, aproximadamente 2% de nuestro producto bruto interno (PBI).

Inversión pública no vinculada a proyectos

Este presupuesto, en teoría, es de inmediata y fácil ejecución. En la práctica, el resultado es menor al anterior. La distribución de esta inversión (S/ 2,689 millones en total), se divide en 78% para el Gobierno Nacional, 10% para los GR y 12% para los GL. Precisamente, los Gobiernos Locales han ejecutado 24% de su presupuesto (menos que con Invierte.pe). En el caso de los GL y del GN, la cifra es inaceptable (15%, mucho menos que con Invierte.pe).

En 2019, también por cuarto año consecutivo, el nivel del sector público no superará el 70%, dejando de adquirir en activos no vinculados a proyectos casi S/ 800 millones más.

Mantenimiento

Este presupuesto, también es de inmediata y fácil ejecución, y tiene mucho impacto en el PBI, además de afectar más directa y positivamente el servicio al ciudadano. La distribución en este rubro (S/ 4,807 millones en total), se divide en 76% para el GN, 16% para los GL y 9% para los GR. Precisamente, los Gobiernos Regionales muestra el peor desempeño (15%), mucho menor que los GL (30%) y el GN (37%).

En 2019, para variar por cuarto año consecutivo, la ejecución promediará el 80%, con la consecuente pérdida de operatividad del Estado para mantener el nivel de servicio al ciudadano por casi S/ 1,000 millones más.

Bienes

Este presupuesto, igualmente de inmediata y fácil ejecución, es de S/ 6,973 millones en total y se divide en 55% para el GN, 24% para los GL y 21% para los GR. El mejor desempeño lo tienen los Gobiernos Locales (37%), seguido por los GR con 33%; mientras el peor desempeño, se da en el GN (31%).

En 2019, como a lo largo de la actual gestión gubernamental, la ejecución promediará el 85%, dejando de ejecutar otros S/ 1,000 millones más. En 2018, ya se había dejado de comprar bienes en Salud por S/ 446 millones y en Seguridad por S/ 93 millones. En 2019, se tiene aún por comprar bienes por S/ 1,693 millones en Salud y S/ 548 millones en Educación.

Servicios

Este presupuesto, asimismo de inmediata y fácil ejecución, es de S/ 22,223 millones en total y se divide en 68% para el GN, 21% para los GL y 12% para los GR. El mejor desempeño lo tienen los Gobiernos Locales (45%), seguido por el GN con 40%; mientras el peor desempeño, se da en los GR (36%).

En 2019, como a lo largo de la actual gestión gubernamental, la ejecución promediará el 85%, dejando de ejecutar otros S/ 2,700 millones más. En 2018, ya se había dejado de contratar servicios en Transporte por S/ 442 millones y en Educación por S/ 418 millones. En 2019, se tiene aún por contratar servicios por S/ 2,522 millones en Transporte, S/ 2,445 millones en Salud y S/ 2,403 millones en Educación.

Tareas por desarrollar

1) Marco normativo. Nuestro sector público procesa con lentitud los cambios normativos y no termina de implementarlos antes de que las normas o los funcionarios vuelvan a cambiar. Tanto en inversiones como en presupuesto y contrataciones, las normas cambiaron cada año. Pero en otros rubros, hay tareas pendientes (por ejemplo, la norma para ejecución de obras por administración directa ya cumplió 31 años y requiere una actualización). Esto se extiende a las normas internas de las entidades de gobierno, que deben alinearse con las nuevas normas generales, pues de lo contrario los funcionarios son sancionados por incumplir la antigua norma específica interna, aunque hayan cumplido la nueva norma general nacional.

2) Recursos físicos y materiales. El Estado debe fortalecer su estándar de servicio y su operatividad para mantener el nivel del mismo. No obstante, precisamente el Estado tiene deficiencias para ejecutar gasto inmediato y sencillo como comprar bienes para brindar el servicio o contratar servicios de mantenimiento para mantener su operatividad. Estos rubros tienen un impacto importante en la dinamización de la economía, sobre todo de las pequeñas empresas locales que emplean mucha mano de obra.

3) Recursos humanos. Como cada cuatro años, el cambio de funcionarios y profesionales en los GR y GL ha afectado significativamente su gestión. Esta situación se ha dado también en el Gobierno Nacional con los efectos que podemos observar a nivel micro y macro, también. En muchos casos, los nuevos incorporados (también, hay reincorporados judiciales) no tienen los conocimientos y experiencia de los anteriores, precisamente porque hemos renovado las normas sin considerar el problema que se va a solucionar con dichos cambios. Es urgente recuperar el tiempo perdido con capacitación en servicio, enfatizando estrategias como la asistencia técnica o el intercambio de experiencias, además de comenzar a sistematizar y gestionar el conocimiento.

4) Distribución del presupuesto. El servicio debe ser brindado en el nivel capacitado más cercano al ciudadano, pero el Gobierno Nacional recibe el 55% del presupuesto para comprar bienes y el 68% para contratar servicios (incluso, el 76% del presupuesto para mantenimiento). En este caso, también es necesario mejorar procedimientos imprecisos (por ejemplo, para la contratación de los servicios de mantenimiento) o engorrosos (por ejemplo, la baja de los bienes anteriores para adquirir los nuevos).

5) Liderazgo. Tenemos un conjunto de factores (recursos físicos y humanos, y marco normativo y presupuestal), que son importantes por su magnitud y antigüedad, pero que también están ligados entre sí, lo cual complejiza más aún la problemática. Se requiere un liderazgo central que comience a resolverla, implementando una estrategia con metas concretas y un seguimiento detallado para alcanzar mejores resultados y mejorar los servicios públicos y por ende el bienestar de nuestra población.